08/04/2022 – El Ministerio de Agricultura “observará” aprobaciones para vender al exterior cuando la Secretaría de Comercio Interior informe incumplimientos por parte de las empresas que tienen convenios para el mercado local.
“Acabo de terminar la reunión con el Consorcio ABC. Les informé que quienes no cumplan con los compromisos asumidos con las y los argentinos, no podrán continuar exportando carne”, dijo en marzo pasado el ministro de Agricultura, Julián Domínguez, tras un encuentro con esa cámara de exportadores de carne. En ese momento, el funcionario había recibido a frigoríficos que anunciaron que no podían seguir cumpliendo con el programa de Cortes Cuidados. Los exportadores dieron marcha atrás tras la presión oficial, sumada a una intimación de la Secretaría de Comercio Interior de Roberto Feletti, y siguieron en el plan oficial. El Gobierno hizo su amenaza, que ahora se traduce en una resolución.
Según la resolución conjunta 4 del Ministerio de Agricultura y el Ministerio de Desarrollo Productivo, conocida hoy en el Boletín Oficial, la cartera agrícola que conduce Julián Domínguez podrá en los hechos frenar cualquier exportación de carne hasta tanto la Secretaría de Comercio Interior informe que se cumplió con los compromisos con el Gobierno en materia de acuerdos por abastecimiento y precios.
En abril de 2021, una normativa conjunta de ambos Ministerios creó las Declaraciones Juradas de Operaciones de Exportación de Carne (DJEC). Desde un comienzo, las entidades del campo advirtieron que ese mecanismo iba a servir para eventualmente controlar las ventas al exterior.
En rigor, la resolución de hoy señala que “la Secretaría de Comercio Interior informará a la Dirección Nacional de Control Comercial Agropecuario los incumplimientos, en el marco de su competencia, a los acuerdos de precios y/o normativa aplicable a la industria de carne vacuna concretados por parte de los sujetos obligados en los términos del Artículo 1º de la citada Resolución Conjunta Nº RESFC-2021-3-APN-MAGYP [es la norma que creó las DJEC]”.
Luego añade: “La Dirección Nacional de Control Comercial Agropecuario observará las Declaraciones Juradas de Operaciones de Exportación de Carne (DJEC) según lo informado por la referida Secretaría de Comercio Interior hasta que ésta informe que los sujetos obligados hayan cumplido con el régimen aplicable”.
Según habían dicho en Agricultura a este medio en marzo pasado, sobre un compromiso de 6000 toneladas por mes de abastecimiento de los exportadores al mercado interno, “en febrero cumplieron con 2500 toneladas, el 40%”.
Precios
La resolución habla de la palabra “observará” para algo que en los hechos podrá ser un freno a las ventas al exterior hasta que se verifique un cumplimiento de los acuerdos.
El Gobierno pone como excusa la guerra entre Rusia y Ucrania para justificar la medida, además de la suba de los precios internacionales. Es decir, en lugar de ver como una oportunidad que se exporte más e ingresen más dólares, ve al momento de precios como un problema.
“El conflicto bélico en la región del Mar Negro (Ucrania-Federación Rusa) añade mayores riesgos a la seguridad alimentaria ya que afecta de forma significativa el abastecimiento global de productos alimentarios y genera alzas en los precios internacionales”, dice la normativa. Señala que el índice de precios de la carne de la FAO registró un promedio de 112,8 puntos, “esto es un 1,1 % más que el mes anterior y un 15,3% por encima de febrero 2021″. Añade que “en febrero las cotizaciones internacionales de la carne bovina alcanzaron un nuevo récord, impulsadas por una fuerte demanda mundial de importaciones”.
Vale recordar que, pese a que en los dos primeros meses del año las exportaciones de carne vacuna en volumen bajaron 9,7%, en valor se registró un importante salto del 23,5% versus igual período de 2021 y acumularon casi US$500 millones. Fue por la mejora precisamente de las cotizaciones internacionales, que viene de antes de la guerra en Ucrania que se inició el 24 de febrero pasado. En febrero último, el valor promedio de exportación fue un 37,8% mayor al registrado en el mismo mes de 2021.
Para los exportadores, se trata de un nuevo control a la actividad luego del cepo de 2021 a la venta al exterior y a la veda de siete cortes populares que siguen imposibilitados de colocar en el exterior. En la práctica hay un comercio administrado por Agricultura.
Luego de que en marzo pasado los frigoríficos exportadores intentaran bajarse de Cortes Cuidados, ayer Comercio Interior informó la renovación de ese programa con siete cortes que se encuentran en supermercados.
Según indicó, para la nueva etapa, que se extenderá hasta el 7 de julio, “los valores de los cortes serán (por kilo): asado $679, vacío $815, matambre $810, falda $449, tapa de asado $679, nalga $859 y paleta $699. En este caso, los cortes tienen una pauta promedio de aumento del 2,8% para el primer mes. Además, el asado y la falda mantienen el mismo precio que en la fase anterior”.
Fernando Bertello
La Nación