09/08/2021 – Hay entre 10 y 12 por ciento menos animales que un año atrás. En 75 días, la facturación mensual del ganado para faena perdió 10.000 millones de pesos.

En julio, una oferta ganadera sensiblemente inferior a la de igual mes del año pasado, con una caída de entre el 10 y el 12 por ciento, le pone un límite al retroceso en el precio de la hacienda.

Con la limitación de las exportaciones, la cantidad de carne disponible para el mercado local ascendió entre cinco y siete kilos, para llegar hasta los 52 kilos per cápita equivalente anual.

El resultado fue una caída del precio promedio de la hacienda en los últimos 75 días del 10 por ciento en términos nominales y 16 por ciento en valores reales, lo que representa una merma no inferior a los 10.000 millones de pesos en la facturación mensual del ganado para faena.

Los precios al mostrador, en tanto, subieron 15 por ciento desde junio, mostrando cierta estabilidad –con una ligera tendencia a la caída– en julio.

El problema es que la reducción del precio al productor no convence a las autoridades, que ahora se preguntan: para levantar o mitigar el cierre de exportaciones, ¿la baja del precio de la carne debe computarse en términos nominales o en reales? Mientras deshojan la margarita, el país pierde 100 millones de dólares mensuales de ingresos de divisas.

El conflicto va a ser difícil de soslayar en los próximos meses y años: una producción de carne estancada o en retroceso, una demanda internacional muy firme en volumen y en valor, y un poder adquisitivo de la población local que no hace otra cosa más que caer. El problema no es el precio de la carne, es la caída de los ingresos reales de los argentinos. Esto sirve para la carne, el pan, la leche o las tarifas de los servicios públicos.

http://lacesira.net/productos/

Incertidumbre

En este contexto, se abren varios interrogantes para los últimos cinco meses del año: ¿cómo impactará en la producción y comercio internacional de carne la reciente aparición de un brote de peste porcina africana en República Dominicana?

La política ganadera del gobierno, ¿se radicalizará si gana las elecciones? ¿Y si las pierde?

¿Cómo impactará la seca que están pronosticando los meteorólogos para los próximos meses sobre la eficacia del servicio de primavera?

China, afectada nuevamente por el Covid-19, ¿comprará grandes volúmenes en el próximo trimestre, cómo hace todos los años?

La explosiva difusión de la variante Delta, ¿afectará el comercio mundial de carne vacuna?

¿Seguirán los feedlots en Argentina con una oferta entre 15 por ciento y 20 por ciento inferior al año pasado?

Son muchas más las incógnitas que las respuestas.

Ignacio Iriarte
Agrovoz