03/02/2022 – El presidente de la Sociedad Rural de San Justo, Mariano Zuqueli, alertó sobre la situación que atraviesa el sector productivo de la zona. Asegura que la caída en los rindes de los cultivos, acusará impacto en la economía de la región.
A pesar de la llegada de las lluvias en las últimas semanas, las consecuencias de la prolongada y profunda sequía que afectó a una amplia zona productiva del país, y en particular de la provincia de Santa Fe, son muchas.
En la zona de San Justo, en el centro-norte de Santa Fe, cayeron arriba de 100 milímetros en las últimas dos semanas. Pese al alivio, la situación sigue siendo crítica. En diálogo con Agroclave, Mariano Zuqueli, presidente de la Sociedad Rural de San Justo, detalló la situación en esta zona agrícola ganadera santafesina. “Las lluvias aliviaron un poco la sequía que veníamos sufriendo, pero no nos engañemos porque seguimos en emergencia. No vamos a tener un año como el 2021. Los rindes serán diferentes totalmente”, advirtió.
Sobre la situación de los cultivos, Zuqueli describió: “El maíz de primera fue el menos afectado, pero para el de segunda disminuyeron notablemente los rindes. Las altas temperaturas lo quemaron y la espiga que tiene es chica. La soja que se sembró en los primeros días también fue la más afectada. Por suerte a la oleaginosa de segunda, los peores momentos la encontraron pequeña, por lo que sigue con viento a favor, a pesar de sufrir una merma en los rindes”.
El dirigente santafesino reconoció que después de las lluvias, hubo escasez de semillas. “Las empresas que venden insumos agropecuarios, nos comentaban que el productor estaba desesperado buscando semilla para resembrar algunos lotes. Pero no se conseguía por la alta demanda. Este será un año donde tendremos una trilla bastante larga, con soja que se estará cosechando fuera de término, y los rindes, sin duda se verán afectados“, contó. Respecto al tema rindes, ya se está viendo en el girasol. “Algunos productores me contaban que, si bien no tenían los números finales, la oleaginosa estaba rindiendo muy poco. La lluvia no le llegó en tiempo y forma”, señaló.
Los ganaderos adelantaron las ventas
“A mediados de enero, teníamos muchos problemas de pasto. La alfalfa no se recuperaba y no se alcanzaba a hacer la rotación que se venía realizando normalmente en las unidades productivas”, describió Zuqueli. Las altas temperaturas, trajeron como consecuencia la pérdida de peso en los animales.
“En el norte del departamento, había campos muy afectados, con una muy baja calidad en el pasto”, señaló. Como consecuencia de este panorama, “muchos productores salieron a vender antes de tiempo para darle prioridad a los animales que venían atrás y bajar las cargas en todas las unidades productivas”, detalló el dirigente rural.
En relación al peso, en la zona de San Cristóbal y Tostado, se estima una pérdida promedio de 20%. “Lo que pasará en ganadería será muy similar a lo que ocurre con la soja: vamos a tener que alargar el servicio de primavera. Tendría que estar terminando a mediado de febrero, pero la mayoría los llevará hacia fin de mes o primeros días de marzo. Hoy se comienzan a ver celos en los rodeos de cría debido a que la vaca comenzó a mejorar su condición”, señaló Zuqueli.
Las alfalfas se recuperaron, aunque hubo pérdidas de brotes en campos ganaderos ya que las altas temperaturas los quemaban. Los campos naturales estaban totalmente “pelados”.
Ante la pregunta de si es posible cuantificar las pérdidas que sufrió la zona, el presidente de la Sociedad Rural de San Justo contó que hicieron una evaluación, aunque todavía es “muy parcial”, y todavía no tienen un número final. “Habrá que esperar unos días”, reconoció.
Semanas atrás, la entidad había difundido un informe de la “desesperante situación” que afectaba a los cultivos y la ganadería en la zona. Para el 14 de enero, para maíz de primera, se pronosticaban pérdidas de entre 25% y 50% del rendimiento. El maíz de segunda era el más comprometido, con pérdidas totales de plantas y cultivos en varios sectores. Para el sorgo se pronosticaban pérdidas de hasta el 50% de rinde. Mientras que la soja tardía, al igual que el maíz de segunda, estaba muy comprometida, con muy poca agua útil.
Por su parte, los campos ganaderos se encontraban con poco pasto y a la sequía se sumaba la bajante de los ríos que provoca disminución de los niveles de napas y cañadas secas.
Emergencia climática
El 18 de enero, la Provincia de Santa Fe fue declarada en Emergencia y/o Desastre Agropecuario como consecuencia de la sequía. La situación comprende desde el 1 de enero hasta el 30 de junio de 2022 a las explotaciones agrícolas extensivas y a la ganadería en general afectadas por este fenómeno.
En tal sentido, el dirigente rural contó: “La semana pasada nos llegaron las circulares para que los productores presenten la documentación”. Renglón seguido, insistió: “No nos engañemos, seguimos en emergencia. Estamos siguiendo de cerca las consecuencias de todos los índices que fueron afectados principalmente en enero. Asusta observar que tendremos una merma importante para la soja, un cultivo que empuja mucho a todas las unidades productivas y que impacta en la economía de la región. La situación será diferente a la del año pasado, en la que tuvimos rindes récords en la zona”.
Planificando la agenda institucional 2022
La comisión directiva de la Sociedad Rural de San Justo viene trabajando en el armado del calendario 2022. Entre las novedades, Zuqueli anticipó que esperan volver a realizar la exposición anual que ya es una marca registrada de la ciudad. Además, se vienen novedades en materia de capacitaciones. “Venimos invirtiendo tiempo y recursos en los últimos tres años, y queremos seguir acompañando a los productores en lo que necesiten día a día”, cerró.