03/02/2022 – Dirigentes del sector apuntaron contra la decisión del diputado de dejar la presidencia del bloque del Frente de Todos en un momento clave de la relación con el FMI.
En medio de la crisis interna que se vive en el oficialismo por la renuncia de Máximo Kirchner como presidente del bloque del Frente de Todos por sus diferencias con el principio de entendimiento con el Fondo Monetario Internacional (FMI), y antes de enviar al Congreso el proyecto de ley del acuerdo de renegociación de la deuda oficial, los dirigentes del campo apuntaron contra el legislador. Manifestaron su preocupación y remarcaron que no se trata solo de la interna de un partido o de un bloque, sino que es un asunto que en medio de las negociaciones “complica a todos”.
Carlos Iannizzotto, presidente de Coninagro, criticó el comportamiento del dirigente del Frente de Todos en un posteo en redes sociales. “El entendimiento con el FMI exige y supone una fuerte conducción política, pero en este portazo de Máximo Kirchner vemos el primer síntoma interno endeble y de división en el Frente de Todos. Estas conductas rabiosas son propias de un Gobierno que nos está llevando a la pobreza”.
Por otro lado, el dirigente sostuvo en diálogo con LA NACION que esta crisis en el oficialismo “deja de manifiesto que no hay conducción”. También indicó que muestra una debilidad en la oposición y todo el arco político, antes, durante y en la actualidad sobre lo firmado. “Especulan electoralmente como el oficialismo, que es totalmente cómplice”, dijo.
Para Iannizzotto, no hay plan económico ni propuesta para detener el déficit, el asistencialismo, ni favorecer la matriz productiva nacional. “No podemos admitir que el ajuste recaiga sobre las pymes, la clase media y trabajadora. Seguirá el mismo sistema cambiario, tasas de interés elevadas, poca actividad productiva”, afirmó.
Por su parte, Nicolas del Pino, presidente de la Sociedad Rural Argentina (SRA), señaló: “Las diferencias en la coalición gobernante no hacen otra cosa que generar incertidumbre en el campo y más aún, en un gobierno que por ahora no ha alcanzado un marco de previsibilidad para los productores”.
En tanto, Carlos Achetoni, presidente de la Federación Agraria Argentina, aclaró que como entidad no pueden ni deben opinar sobre una interna en ningún partido político. Pero dijo sobre este caso: “No se trata solo de la interna de un partido o de un bloque, y eso es lo que nos complica a todos”.
En ese sentido, opinó: “El problema se da cuando la interna se expone públicamente, siendo el partido que a la fecha gobierna el país y en un contexto complicado como es que estuvimos durante mucho tiempo con mucha incertidumbre política y económica con relación a la negociación con el FMI. Y cuando el gobierno anuncia que se avanzaría en un sentido y pareciera que se comienza a dar alguna certidumbre (al interior y al exterior del país), en menos de 24 horas se vuelve a dinamitar el escenario con una crisis derivada de una interna política”.
En esa línea, agregó: “Así se vuelve a foja cero con la incertidumbre económica y política, porque genera muchas dudas acerca de la representatividad que puede tener la renuncia del hijo de la vicepresidenta de la Nación, con todo lo que eso implica”.
Por otro lado, Horacio Salaverri, presidente de la Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa (Carbap), en diálogo con LA NACION expresó: “Acá el problema es que en la coalición gobernante cuando hay temas complejos como estos, que tienen contenido ideológico y que son de fondo, no logran un acuerdo, ponen en vilo al país y complican mucho la situación hacia adelante con cuestiones que son definitorias para la economía argentina”.
Para el dirigente, lo que el país necesita en asuntos como estos es que la oposición y el oficialismo se encolumnen para sacar al país hacia adelante. En ese sentido, comentó: “Nosotros entendemos que en la precariedad económica y social que tiene la Argentina estas peleas de poder no tienen que tener más margen. Es totalmente preocupante la situación que está atravesando el país en base a complejidades y falta de criterios y hasta enfrentamiento dentro de la coalición gobernante”.
Pilar Vazquez
La Nación