01/06/2021 – El nuevo presidente de la Sociedad Rural Argentina (SRA) se refirió en diálogo con LA NACION al momento que vive el sector, el cierre de exportaciones de carne, su inserción en la Mesa de Enlace y cómo será su gestión.
“Siempre la mala política mete la cola, buscando un adversario. El Gobierno muestra al campo como si fuese el enemigo de la sociedad. En realidad, somos los aliados y entre todos podemos trabajar muy bien de manera conjunta”.
Las palabras pertenecen Nicolás Pino, nuevo presidente de la Sociedad Rural Argentina (SRA) tras vencer en las elecciones internas por el espacio Movimiento Compromiso Federal al candidato oficialista Daniel Pelegrina, de Unidad y Acción, que dejó de ser el titular de la entidad.
El productor entiende que el campo vive tiempos difíciles y turbulentos, y no porque la naturaleza esté jugando una mala pasada, sino “porque el Gobierno se ha ensañado con ellos y desde hace tiempo los enfrenta”.
“Mientras nosotros pensamos en trabajar y mejorar la productividad del sector, las decisiones del Gobierno en contra de la actividad generan desazón, angustia y bronca”, dijo a LA NACION.
Para Pino, el cierre de las exportaciones de carne vacuna por 30 días que decidió el presidente Alberto Fernández para bajar el precio no tendrá efectos positivos.
“No es la exportación de carne la que presiona sobre el precio que paga el consumidor local. Nos alcanza para abastecernos y a la vez para exportar. Deben entender que podemos exportar y a la vez la mesa de todos los argentinos estará cubierta. Este cierre es una medida contraria para salir adelante como país”, describió.
“Lo virtuoso que se generó en la actividad en los últimos años, de un día para otro, con determinaciones de este tipo se desalientan la inversión. El productor ganadero apuesta siempre. No solo subió la carne, aumentaron las verduras, la nafta y otros tantos productos de la canasta familiar. El problema del aumento del precio de la carne está en una inflación de más del 50%, que no puede ser controlada”, añadió.
En este contexto, el presidente de la SRA explicó que estas restricciones son recetas ya conocidas que no funcionaron en el pasado. “Ya se aplicaron con Néstor Kirchner y con Cristina Fernández y no tuvieron resultados efectivos, muy por el contrario desalentaron la producción ganadera”, afirmó.
Para Pino, el Gobierno debiera tener herramientas para solucionar el tema del “rulo cárnico pero no cerrar la exportación por unos pocos pícaros”. Indicó que la relación Gobierno-campo se puede construir sólidamente pero que existen posiciones encontradas en el seno del oficialismo que lo dificulta: “Es un tema interno y en esa discusión pegan al campo”.
En cuanto a su ensamble como nuevo integrante de la Mesa de Enlace, contó que tiene la suerte de conocer y haber trabajado con los otros dirigentes en varias oportunidades. “Quiero acompañar el gran trabajo que vienen construyendo en defensa de los productores. Debemos mostrarnos unidos”, dijo.
Pino es porteño, tiene 55 años y pertenece a la tercera generación de productores agropecuarios. Ayer, luego de su triunfo electoral, se viralizó por las redes sociales un video de hace casi 40 años, cuando era estudiante secundario y donde junto a un grupo de amigos del colegio Champagnat se ofrecían como voluntarios para pelear en la Guerra de Malvinas. “Siempre fui muy idealista y una vez un padre de un amigo me dijo que los idealistas en este país se pegan muchos golpes”, dijo.
Con más de 30 años en el sector y en el gremialismo, entiende que la manera de comunicar de la entidad fue fallida. Su futura gestión como presidente de “una institución a la que conoce al dedillo será entonces terminar con los liderazgos sin sentido”.
“Vamos a intentar cambiar la manera de dirigir la Rural, dejar el presidencialismo de lado para convertirnos en una entidad más horizontal, donde el protagonismo pase por cada director de cada zona, para hacer una rural más federal. Tuvimos una falla de comunicación de cómo llegar a la gente y debemos remediarlo”, finalizó.
Mariana Reinke
La Nación