20/08/2021 – Según el análisis que realizó en el congreso de Aapresid el experto en clima del INTA Roberto De Ruyver, las chances de tener el mismo evento que en 2020 están cercanas al 70%, aunque sería de menor intensidad.
“Las probabilidades de tener una fase fría o La Niña están cercanas al 70% y de una fase de neutra solo el 30%. Es probable que vayamos nuevamente hacia una condición de Niña, tal como sucedió el verano pasado”. Esa fue la conclusión a la que llegó Roberto De Ruyver, director del Instituto de Clima y Agua del INTA, durante su exposición en el congreso anual que lleva adelante Aapresid bajo el lema “Siempre verde, siempre diverso”.
En este sentido y en alusión al verano anterior, describió cuál fue la frecuencia histórica de dos veranos consecutivos con la misma fase fría o evento La Niña que tuvo la Argentina. “Si uno mira en la historia, esto es más frecuente de lo que uno cree. Sobre los 20 eventos La Niña desde 1960 hasta la actualidad, en nueve ocasiones ocurrió que hubo fase fría o La Niña en dos veranos seguidos”, describió.
“Eso da un 45% de probabilidad, dejando la suma de la fase cálida y la fase neutra en un 55%. Por lo cual, la posibilidad de repetición de fase La Niña (como el verano anterior) con un evento similar precedente es alta”, añadió.
En este contexto, el experto en clima del INTA dijo que, cuando hay dos eventos consecutivos de La Niña, en el primer verano de La Niña “los valores medios de intensidad parecieran ser mayores a los que suceden el año siguiente, que tienden a estar más cerca del cero, o sea una Niña no tan fuerte”.
Y dando un poco de esperanza para los productores señaló: “Lo que uno tiende a ver es que la segunda Niña suele no ser tan intensa como la del verano precedente, al menos lo que se ve estadísticamente”.
Por otra parte, y de acuerdo a un análisis de largo plazo, realizó la siguiente observación: “Desde que se tienen registros, el año 1960 fue seco, los años 70-80 húmedos y el comienzo de año 2000 otra vez seco. Ahora estaríamos entrando en un posible período de largo plazo donde predominen más los años secos que los húmedos. El escenario futuro es de años secos así como también las primaveras”.
Pronóstico en el corto y mediano plazo
Para los próximos días, es decir en un periodo de seis días, la tendencia meteorológica es de un pronóstico de precipitaciones deficitario: “Principalmente las precipitaciones solo ocurrían sobre la Patagonia, solo por encima de lo normal. Pero en el centro y norte del país casi no hay lluvias, apenas hay algo en el este bonaerense y en el norte entrerriano y en el sur de Corrientes, que llevará a una reducción del rojo de esta anomalía negativa de precipitaciones que está en el centro y norte del país”.
“Pareciera que no termina el período seco que arrastramos del invierno. Para los últimos días del mes de agosto la perspectiva no es nada buena, solo hay pronósticos de lluvias moderadas para Misiones y el este de Corrientes y algo en el extremo sur de la Patagonia. Esto termina siendo deficitario en casi todo el país”, señaló.
En tanto, para el trimestre agosto-octubre las condiciones de lluvias, De Ruyver indicó que continuarían siendo deficitarias y solo La Pampa y en el oeste bonaerense tendrían una condición más normal. En cuanto al trimestre septiembre-noviembre, según los pronósticos analizados, todo el país se encuentra en una condición de probable déficit.
“Hay consensos en los distintos modelos mundiales a que se presente una primavera probablemente deficitaria de precipitaciones para nuestro país, a diferencia del nordeste brasileño. En el verano está condición se mantiene todo el tiempo”, afirmó.
Mariana Reinke
La Nación